Lo primero que os cuento es que no quiero que esto sea un post eterno tipo testamento, asi que voy a dividir el bautizo en dos partes. Estad atentos al blog para ver la segunda!
Bueno, para los que me sigáis, y vierais la lámina que le hice cuando cumplió un mes y atéis cabos, Paola es mi sobrina, y como no, me hizo mucha ilusión cuando sus papas me pidieron que me encargara de los detallitos del bautizo.
Laura, que es mi cuñada, además de tener unas manos geniales para la costura y las manualidades en general, tiene mucho gusto, y por eso en seguida supe que iba a quedar un trabajo precioso.
Lo primero que hicimos fue decidir que regalar, y en pronto coincidimos: galletas para las mujeres y vino para los hombres.
Nos pusimos en contacto con Las Tarticas de Raquel, que si no la conocéis, podéis ver las maravillosas cosas que hace en Facebook, y nos ofreció la posibilidad de hacer galletas personalizadas. El mundo de la impresión sobre papel de arroz me parece una gran maravilla, porque cualquier diseño o imagen que quieras, te la pueden plasmar en repostería. Así que preparé un diseño para la galleta en el que aparecía “Paola” con sus kikis en su carrito, basándome en una gama de colores que me encanta (sino, mirad mi logo) el verde agua y el magenta.
Para que veáis como era el diseño que hice y como quedó la galleta, ¿a que es impresionante?
Luego las galletas llevaban una protección de celofán y las metimos en unas cajitas transparentes a las que le diseñé un fondo jugando con el mismo concepto. Además para cerrar la cajita usamos Baker Twine rosa y azul y una etiqueta que acompañaba que decía: Un dulce bautizo.
Para los hombres regalaron vino. Y para decorarlo un poco compramos bolas kraft con asa, para que fuera más cómodo de llevar, y con la misma estética diseñé una etiqueta que decía: La mejor cosecha del año. Jeje, si es que vaya cosecha la de mi sobri!
Raquel también se encargó de hacer unas galletas personalizadas para los dos niños que había en el bautizo: Angela y Alexis. Les regalaron una caja llena de dulces que iban coronadas por estas fantásticas galletas.
Bueno y aquí os dejo, en el próximo post veréis alguna cosita mas que preparamos y como quedó la mesa en la que iba todo. Les dimos una sorpresa a los papas, no se lo esperaban! Y como no puedo aseguraros cuando lo publicaré, lo mejor que podéis hacer es suscribiros al blog (en la columna de la derecha) y no os perderéis nada de lo que publique, porque os llegará al correo electrónico.
¿Qué os parece? ¿Habéis ido a algún bautizo últimamente? ¿Qué os dieron de detalle? ¿Decoraron el restaurante?
Gracias!!!!! Casi me emociono y todo!!!!! Has hecho un trabajo impresionante!!!! Es precioso!!!!!
ResponderEliminarJeje, muchas gracias Raquel, si es que cuando el trabajo queda asi de bonito, pocas palabras hacen falta. Tu trabajo fue genial tambien!!!
EliminarAinsss si es que me encantas!! solo puedo decir GRACIAS!!MUCHAS GRACIAS!! por la ilusion y el cariño que pones en todo lo que haces!!!!!!!!!
ResponderEliminarTu si que me encantas! jajjaa, y mi sobri mas, se merece esto y mucho mas!
EliminarLa decoración fue fantástica una gran elección en los detalles, da pena comerse las galletas con lo bien que quedaron y la tarta buenísima mi nota un diez .
ResponderEliminarGracias M. Jose, quedó muy bien verdad? En el proximo post publicaré la decoración y demas cositas...
EliminarQue buenos detalles. Super original y profesional, practicos y sin gastarse un dineral. Un 10!
ResponderEliminarGracias Daniel, la reposteria es una buena elección, gusta siempre!
EliminarJooo yo que no quería bautizar a mi peque me están entrando unas ganas...qué re-preciosas las galletitas, seguro que además estaban ricas ricas, aunque da una pena comérselas...quedaron de lo más bonitas y graciosas, como todo lo demás! qué bonito todo...
ResponderEliminarBali*
Hola compi, pues aunque no quieras un bautizo religioso, siempre se puede hacer un acto civil, con un maestro de ceremonias, y sino, una comida. Y aprovechar esa comida para hacer mil cosas!!! piensatelo!
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